lunes, 26 de noviembre de 2007

Análisis del Athletic-Deportivo

Más de uno y de dos estarían el domingo a las 19:00 con un sabor agridulce. Decepcionó el solitario punto que sumamos al granero, pues sumar tres era algo a nuestro alcance. La decepción no es total, pues el Athletic jugó uno de sus mejores partidos de la temporada, si no el mejor. El Athletic propuso como novedad a Llorente en punta, a Yeste más atrasado de lo normal, y un dibujo diferente sobre el verde. El Athletic recuperó el rombo que no veiamos desde la temporada 92-93. Del Horno no jugó debido a la lesión sufrida al comienzo de la semana pasada. La única novedad que propuso Lotina fue la de Manuel Pablo por la izquierda, por la sanción de Filipe. El partido comenzó intenso, la tónica que seguiría los 90 minutos. El Athletic tomó el mando desde el principio, con un Yeste inconmensurable, distribuyendo , y aunque jugó mas atras de lo habitual, dijo sentirse a gusto. Esto condicionó su juego, pues no tuvo opción de mostrar su picaresca, sustituida por una labor defensiva destacable. De inicio Iraola avisó por medio de un chupinazo desde fuera del área que impactó en el poste. Siguió el asedio a la meta del israelí Aouate, y en el 23´ un baón colgado desde la derecha lo deja pasar Llorente, y Barragán fusila a su portero. Todo siguió igual en una primera parte sólo del Athletic, y Lotina sustituyó a Xisco por Bodipo antes del descanso. La segunda mitad siguió el guión de la primera, y el Athletic estaba cerca del gol, y en el minuto 54 una contra bien lanzada por D. López, que cedió a Yeste hizo intuir el peligro. Fran Seda Yeste colgó el balón, Gabilondo fracturó la cintura de su marcador, retrasó sobre Llorente, que en semifallo puso a D. López un pase francamente bueno, que tras recortar a Dudú marco su primer gol como león. Ya con el 2-0, Lotina apostó por lo ultraofensivo, metiendo dos hombres más ( Taborda y Riki). A los 8´ del gol del riojano, el árbitro se inventa una falta sobre Riki, que tenía muy mala pinta. San Mamés la cargó contra él, durante todo el partido, igual que contra Coloccini, violento hasta el extremo. La falta la tocaron hacia el centro, y Riki bombardeó a Aranzubia, que pudo hacer algo más, como colocar bien la barrera. El tiro de por si era complicado, pero centrado. Tras el gol los rojiblancos buscaron con más ahinco el gol, pero ninguna de las acciones fructificó. Caparrós sustituyó a Etxeberria, muy activo, por Susaeta y a Llorente por Aduriz. Ambos se habían vaciado. El Depor se asomó timidamente, pero los bilbaínos tenian las de ganar. Caparrós decidió reforzar la defensa metiendo así a Ustaritz al final, por D. López. También porque quería perder tiempo. Quería amarrar el resultado, pero en el 89´ llegó la debacle. Un balón colgado desde la izquierda del ataque deportivista llegó a Taborda, que sin apenas oposición de Aitor Ocio batió a Aranzubia, que se había quedado a media salida. Todos en La Catedral se echaron las manos a la cabeza. El Athletic intentó sin exito recuperar los tres puntos, pero al decretar el colegiado vallisoletano el final del partido, el 2-2 imperaba en el marcador. En resumen, buen partido del conjunto de Caparrós, que aprovechó las bandas, y distribuyó de maravilla, en buen medida gracias al 10. Le necesitabamos. El problema de la falta de gol se va dilapidando, pero son tres los partidos consecutivos encajando 2 goles. No podemos descuidar la defensa. Muchos cargaron contra Aranzubia, pero si bien tuvo gran parte de la culpa, no creemos que él fuera el único culpable. El colegiado, los puntas gallegos, y Ocio en el último tramo del partido contribuyeron. De Ocio queda decir que dejó que Amorebieta dirigiera a la línea de atrás, sin ofrecerle apoyo en las salidas. Con todo esto, el Athletic mostró en ataque la misma cara que en el Rico Perez en el segundo tiempo. Un fútbol coherente que augura tiempos mejores. El próximo domingo estaremos en Mestalla, tratando de aprovecharnos de `la crisis ché´. 14 puntos en 13 partidos no es tan mal bagaje. La nota positiva, las ayudas de los de atrás, que hacen bueno este punto que, desgraciadamente, no es botín semejante al que pudimos obtener.

jueves, 15 de noviembre de 2007

Análisis del Hércules-Athletic (Copa del Rey)



Primero de todo, pedimos disculpas por la tardanza en la publicación del presente artículo debido a algunos contratiempos informáticos que hemos sufrido. Antes de ayer comenzó el Athletic su andadura en la nueva edición copera en el Rico Pérez y ante un Hércules plagado de ex-leones. La Copa es un torneo muy importante en la ciudad bilbaína, al igual que para Caparrós, que ha llegado hasta en tres ocasiones a las semifinales del torneo del "KO". Los periodistas de la zona daban por seguro que jugadores como Zubiaurre, Prieto o Aranzubia formarían parte de la alineación titular, pero "Jokin" sorprendió a propios y a extraños cuando mostró un "once" con varios de los titulares habituales. Aún así, tanto Llorente como Del Horno o Muñoz tenían una bonita oportunidad para buscar un hueco en la alineación que se enfrentará el domingo al Deportivo. "Goiko" también daba oportunidad a los menos habituales como Sendoa, Blas Pérez o el meta Sergio Aragoneses. El choque comenzó con los alicantinos muy metidos en él, poniendo mucha intensidad y ritmo ante un Athletic que, ante este planteamiento no supo reaccionar. Mariño y Javi González eran las principales vías de ataque por sus bandas, y fue este último el que botó una falta frontal desde media distancia que Llera peinó y mandó a gol ante un despistado Iraizoz. Los rojiblancos no pusieron mucho empeño en conseguir el tanto del empate, y en el minuto 36 Camara armaba la pierna y soltaba un disparo desde fuera del área que Gorka se tragó. Las cosas no pintaban bien pero entonces, Sendoa lanzaba una patada voladora al bueno de Iraola, por lo que vería la cartulina roja directa al igual que Andoni Goikoetxea por agredir verbalmente contra los estamentos futbolísticos. Poco más se vio en aquel primer tiempo en el que la casta de Segunda se imponía a la calidad de Primera, tan sólo el ingreso de Aduriz por Gabilondo, muy gris en los 41 minutos que disputó. Para la segunda parte Caparrós movía banquillo por segunda vez: Javi Martínez (que sin Orbaiz perdió mucho como complemento) era el sacrificado para dejar su lugar a Zubiaurre, cuya actuación nos dejó muy buenas sensaciones, pues mostró fondo para recorrer la banda y calidad a la hora de asistir. Con el paso de los minutos David López y Del Horno fueron entonándose, mientras el conjunto alicantino gastaba las reservas que escaseaban en el depósito. En estas, Iraizoz cayó lesionado (un mes por lo que hemos sabido), por lo que Dani Aranzubia regresaba a la meta rojiblanca. El Hércules también movía ficha al dar entrada a Farinós, que sustituía a Mariño, con el objetivo de poner músculo en el centro del campo que sufrió un importante bajón físico. Poco a poco los nuestros se hacían con el control del choque y Yeste comenzaba a disfrutar (pues el planteamiento de inicio del Hércules tan físico privó al diez de la posesión de la pelota). Precisamente este ponía un pase de varios quilates para Asier Del Horno, que acrobáticamente daba un el "pase de la muerte" para Fernando Llorente que, a puerta vacía, rompía su particular sequía goleadora. El segundo de "Goiko" veía necesaria la entrada de Rubén Navarro ante el fundido punta suramericano Blas Pérez. Pero nada. Nuevamente Fran regalaba al espectador un pase que no se ve muchas veces, y su compañero de travesuras Del Horno marcaba al primer toque. La conexión Zipi-Zape volvía a los terrenos de juego, dos jugadores que justificaban de esta manera sus pobres primeras partes. Pronto se cerraba el cupo de sustituciones del día con la entrada en el césped de Ariel, que ocuparía la pacela del campo que hasta el momento correspondñia a Camara. El Athletic se vino arriba con dos bandas activas gracias a la labor de Iraola-Zubiaurre y Del Horno-David López, pero el empeño que los locales pusieron en impedir la remontada superó a los pupilos de Joaquín Caparrós. Así que 2-2, el Athletic camina más firme de lo que muchos piensan en la Copa, pero no desviemos la atención de nuestra asignatura pendiente: la Liga. El Depor nos espera.

lunes, 5 de noviembre de 2007

Análisis del Athletic-Recreativo

Los resultados de los equipos de nuestra liga (la que mira de reojo hacia abajo), obligaban al Athletic a conseguir sumar los tres puntos que se ponían en juego en San Mamés ante un Recreativo muy tocado, que llevaba cuatro partidos sin ver puerta. Objetivo cumplido y primera ilusión para nosotros, con un 2-0 que podía haber sido más abultado. Se especulaba con que Fran Yeste iniciaría el choque como titular, pero Caparrós volvió a darle una oportunidad a Igor Gabilondo, mientras que en la zaga Ustaritz cubría la vacante que Amorebieta dejaba por sanción. Tampoco Asier Del Horno volvía al "once", y Koikili veía como su trabajo seguía dándole la titularidad. En el Recre, destacaba la ausencia en la alineación titular de Javi Guerrero, Quique Álvarez y el talentoso mediapunta rumano Rosu. El encuentro ya comenzó con los bilbaínos muy metidos en él, ante un "Decano" demasiado dubitativo, y que arriesgó jugando con la línea defensiva muy adelantada. Ante este planteamiento; Aduriz, Etxeberria y Susaeta no duraron en utilizar su velocidad para desquiciar a los de Huelva, y surgieron las ocasiones. Una clara de "el Zorro", que perdonó con un disparo suave y sin ningún tipo de colocación. Pocos minutos después, Susa sacaba petróleo de donde no lo había con un lanzamiento cruzado en el que el bote le traicionó. Por último, Aritz remataba un centro botado desde el medio campo, remate complicado donde los haya en el que, a nuestro parecer, nada más pudo haber hecho el ex del Valladolid. Los de Víctor Muñoz pegaron un arreón y tomaron el control del choque durante unos minutos, con Sinama Pongolle a la cabeza y apoyado en banda por el buen hacer de Varela. Pero Koi tapó perfectamente a Varela, mientras que Sinama era cosa de Aitor Ocio y Ustaritz (a nuestros ojos, el mejor de los veintiocho). Los "leones" no se amedrentaron, e Iraola tomó el carril derecho y el partido volvió a coger colores rojiblancos. Así se llegó al descanso, con 0-0 pero un claro dominador, y que volvió a enfrentarse a doce, pues Clos Gómez erró en prácticamente todas sus intervenciones (lo cual tampoco es novedad). Con la segunda mitad se inauguraba el movimiento en los banquillos, pues el entrenador de los blanquiazules decidió meter a Javi Guerrero y a Gerard, sustituyendo a Varela y a Martins, respectivamente, para, en palabras del propio técnico, "dar frescura". Sin embargo, la labor de contención de Pablo Orbaiz, así como la de Javi Martínez impidieron a Gerard (bajo en forma debido a su reciente lesión) tomor la batuta del centro del campo. Los de "Jokin" siguieron imbadiendo la línea de tres cuartos, con un juego de bandas de Gabilondo y Markel Susaeta, apoyados por el "Gallo", mientras que Aduriz continuaba "desgastando" a la más bien blanda defensa andaluza. Y, en estas, la figura del destacado Andoni Iraola volvió a aparecer por el costado derecho, regalando a nuestro capitán un pase que era medio gol, la otra mitad se ancargó de no perdonarla el "Potro". El juego que se desplegaba en "La Catredal" era esperanzador y vio su recompensa con un segunda tanto de Joseba (el gol 100 en el partido 400), un gol que demuestra que hay que pelear cada balón en juego, pues la presión de los locales "invitó" a Sorrentino a fallar. El técnico de los onubenses se decantó a gastar su última sustitución, dando entrada a Marquitos relegando al ostracismo del banquillo a Camuñas. Tampoco dio resultado, pues la inconmensurable pareja Ocio-Ustaritz no dio oportunidad alguna al veloz extremo internacional en categorías inferiores. Con el 2-0 en el videomarcador, todos los aficionados rojiblancos miraban directamente al asiento que ocupaba Fran Yeste, esperando el ansiadísimo regreso del basauritarra. En lugar del diez, quien ingresó en césped fue Fernando Llorente, quien salió con una actitud digna de aplaudir, saliendo a la presión, estando activo en todo momento etc. Esta vez sí, Fran, con su nuevo "look" y los cuellos subidos hasta arriba al más puro estilo Eric Cantoná, saltaba después de tres meses y medio al verde, en el que recibió su merecida obación. El Athletic vio que aquello era una fiesta (con todo el respeto hacia el Recreativo), y los jugadores se deleitaron, Yeste incluso dejó algún que otro tacón para el recuerdo. Con todo el bacalao vendido, el míster utrerano gastaba el cupo de cambios, sentando a Suaseta (que también recibió su merecida obación) por David López. El encuentro concluyó de esta manera y tres puntos para el saco, que esperemos siga "engordando" ante el Espanyol de Txingurri Valverde, ante el que, sin embargo, habrá que derramar sangre, sudor y lágrimas para sumar. Aún así, confiamos en Caparrós y sus pupilos.